Más allá de que pueda parecer un capricho para el niño o un regalo que quiera hacerle la familia, ir a un campus, y en concreto de fútbol, sería una experiencia que todo niño o niña deberían vivir al menos en algún momento de su vida infantil y juvenil. Campus como el que ofrece Coerver® Coaching por su formato planificado, siguiendo un método, su orientación hacia la formación y por contar con avalados profesionales tienen un gran número de beneficios para el niño y la niña que resumimos en los siguientes 10 puntos:
1.Aprendizaje en valores. Dentro de un campus Coerver®, los niños aprenden a ser más tolerantes, los hábitos de compartir y se sentirán en igualdad, ya que cada alumno es igual sea cual sea su procedencia o condición.
2.Socialización. Se produce una convivencia con niños y personas diferentes a las de su círculos de todo el año. Se hacen nuevas amistades en situaciones diferentes como compartir equipo, entrenamientos, juegos, habitación, comidas…
3.Funcionamiento según un método. Es importante que en determinadas edades el niño sea consciente de lo que supone seguir un método con unos roles de conducta, horarios, control, entre otros aspectos, ya que le valdrá para situaciones que tendrá que afrontar en un futuro.
4.Se aprenden hábitos saludables. En el campus los alumnos llevarán unos hábitos saludables al practicar deporte, pero también en lo referente a alimentación y en el desarrollo de su tiempo libre.
5.Aumento de la autonomía. El alumno de un campus, pasa una semana motivado a cumplir sus deberes en función de sus actividades y eso le hace ganar autonomía y aprender sobre responsabilidad y autosuficiencia.

6.Trabajo en equipo. Un deporte como el fútbol es un juego de equipo, pero además de en las sesiones de entrenamiento esto se tiene en cuenta en todas las actividades del campus, uno no es nadie sin sus compañeros, se potencia la colaboración.
7.Planificación a cargo de profesionales. Una semana de vacaciones en un entorno de entrenadores profesionales y personas formadas en el trabajo con los niños será siempre mucho más provechosa al contar con una planificación que está ideada para las condiciones y edades de los alumnos.
8.Orientación al niño. El equipo de profesionales del staff del campus siempre centrará su actividad en los protagonistas del campus, los niños, buscarán que los participantes aprendan y se diviertan aplicando sus aprendizajes en su día a día con la vocación que obtengan unas enseñanzas que les valga para la vida posterior fuera del campus.
9.Respiro para los padres. Los campus hacen que durante una semana el niño esté ocupado y que eso suponga un respiro para los padres, tanto para la conciliación de la vida laboral y familiar como en la relación de ambos y en la faceta personal.
10.El niño es el protagonista. Los objetivos del campus siempre están orientados a los que lo hacen posible: los niños y niñas que participan. Ya sea en el plano deportivo como en las actividades extras, el equipo trabaja para que los participantes aprendan, se diviertan y apliquen todo el aprendizaje a su día a día. Una experiencia inolvidable que les haga crecer.